BIBLIOTECA Y ARCHIVO DE MAGALLANES

La Nueva Biblioteca y Archivo Regional de Magallanes se plantea como un espacio publico integrador de la comunidad Magallánica, con su historia y con el mundo. La idea de acercar lugares y culturas lejanas a través de una Biblioteca cobra mayor sentido en uno de los rincones mas remotos del planeta, donde forjados por el clima extremo, el aislamiento, la lucha por la supervivencia de sus habitantes y la voluntad de colonizar, condicionó un habitar único e irrepetible.

La premisa originaria de nuestra propuesta de una biblioteca como espacio integrador nos condicionó a liberar la mayor cantidad de superficie para los programas públicos, un interior común a nivel peatonal.

Para lograr esto verticalmente estratificamos el programa dejando en los pisos superiores los espacios de menor afluencia de publico y  las oficinas. Concentramos en las plantas los programas semipúblicos y de acceso restringido. Así es como dos de los edificios preexistentes, el edificio de la Penitenciaría y el de Gendarmería, cuyas estructuras no permite espacios continuos de gran tamaño, alberga los programas mas específicos.

Al demoler las edificaciones de menor valor construidas con posterioridad a 1910, liberamos los vacíos entre las edificaciones patrimoniales los cuales convertimos en espacios interiores generosos, luminosos y flexibles que integran y albergan la vida de la comunidad magallánica además de marcar el traspaso entre un programa y otro.

La tradición arquitectónica de esta región remota es consistente con la arquitectura de lugares  extremos, de refugio, de volúmenes austeros que se construyen y organizan para ofrecer protección, no sólo de las inclemencias, si no de la bastedad.

Es así como La Nueva Biblioteca y El Archivo se organizaron según la tradición de los asentamientos y haciendas magallánicas, por adición y agrupación. Cada volumen tiene la forma rotunda que le otorga su uso y la condición lumínica que el programa exige, nada sobra, carecen de ornamentos y la relación de estos entre sí son vacíos protegidos del viento y la soledad.

Volúmenes:

“El Galpón” es la nave que reconstituye la manzana, manteniendo los niveles y el ritmo de las edificaciones preexistentes de gran valor de conjunto, recuerda por su rotunda fachada de celosía los galpones de secado de lana de las estancias ovejeras. Protegiendo en sus pisos superiores El Nuevo Archivo. A nivel peatonal alberga el hall de acceso principal a la biblioteca y el archivo, este nuevo espacio urbano contempla la cafetería y es el punto de encuentro de la sociedad contemporánea en torno a la cultura, pudiendo articularse con otros recintos de volúmenes contiguos permitiendo de esta forma infinitos usos; Exposiciones, reuniones sociales, recepciones, sirviendo ocasionalmente de foyer del auditorio que se encuentra bajo.

“Las Celdas” por su magnífica amplitud alberga la Nueva Biblioteca. Su condición de claustro, su ubicación al interior del predio y su gran vacío central, contenido en el perímetro por las estanterías que rodean a los usuarios con la cultura acumulada por el hombre. Las celdas se convierten en salas de estudio y archivos específicos. La cubierta se reemplaza por una que extiende la geometría original, en una sola gran agua que toma la luz tamizada proveniente del norte y la conduce al interior.

“El Invernadero” recuerda espacios existentes en las viajas casonas de Punta Arenas, lugares luminosos y protegidos, donde crecían y se reproducían especies vegetales de lugares lejanos y donde se puede  disfrutar del “exterior” en este clima tan adverso. Con el fin abrir los niños al mundo, destaparlos es que hemos ubicado la Nueva Biblioteca para Niños ahí. Emplazado en el vacío liberado entre el edificio de la Penitenciaría y las Celdas, sirve de distancia para apreciar la austera y potente fachada de ladrillo de la biblioteca. Este espacio posee mobiliario móvil para que en ocasiones sirva de extensión y apoyo del hall o un gran teatro para presentaciones infantiles.

-“Corredor” el espacio que queda tras “La Celda” se articula a la biblioteca como una sala mas intima y de estudio, que alberga la Sala de lectura y Colección General. Iluminada cenitalmente por una claraboya que toma luz sur, luz mas apropiada para una sala con ese propósito. Su altura dramatiza la condición de esta sala y permite apreciar otro de los  muros perimetrales del edifico de “Las Celdas”.

“Patio Siberia” es el único lugar que no hemos tocado por su carga simbólica.

Hemos dedicado un cuidado especial a las condiciones ambientes e iluminación, de cada uno de los volúmenes/programas, no sólo por los aspectos técnicos que una biblioteca y archivo deben contemplar, si no para tratar de no perder el dramatismo de la atmosfera que hoy posee el viejo edificio y así transmitir o perpetuar la calidad lumínica de la edificación preexistente.

El juego de cubiertas imita el ritmo y la diversidad de colores de las cubiertas de Punta Arenas, la idea es que el nuevo edificio pese a su tamaño no afecte al grano y la silueta del plano de la ciudad.

Acondicionamiento Climático es una preocupación central en climas tan extremos, la propuesta de agrupar estos volúmenes generando un volumen simple reduce al máximo el perímetro del edifico y con esto la perdida de calor. Reforzar la envolvente térmica con termopaneles triples en las zonas acristaladas para no perder la iluminación natural, pero tampoco temperatura. La climatización se propone en base  losas radiantes con calderas a gas de bajo costo de operación en la zona. Finalmente la ventilación es abordada a través de un sistema de ductos que recirculan el aire por convección.

Dado la complejidad de construir por el clima y que gran parte de los materiales son traídos de otros lugares se propone elementos repetitivos prefabricados, con esto se podrán trabajar simultáneamente a la fabricación de cerchas de los volúmenes y estructuras, las excavaciones y elementos de hormigón. Acelerando los procesos de faena en terreno, acortando plazos y reduciendo presupuestos.

Se plantea un sistema de Biblioteca abierta, a diferencia de una biblioteca tradicional donde las bibliotecarias están asignadas a áreas específicas y desvinculadas, estas trabaja en un mesón central lo que trae varias ventajas; es mas rápido llegar al conocimiento dado que colaboran en equipo para encontrar el material solicitado, hay un ahorro en espacio y al estar las salas de lecturas no separadas por géneros se pueden generar nuevas relaciones entre los visitantes.