Iglesia San Francisco Cerro Barón Valparaíso

PROPUESTA DE INTERVENCIÓN ARQUITECTÓNICA
EJES ARQUITECTÓNICOS PRINCIPALES

De la Iglesia
Se propone recuperar y potencia la espacialidad original de la Iglesia con materiales y maderas renovables y utilizando la luz para acentuar los espacios.

– Reconstrucción de estructura de techumbre, recuperando la espacialidad original de la nave, con la bóveda de cañón en la nave central y los techos planos en las naves laterales. En la zona del coro, quedan las 3 naves abovedadas según se aprecian en la documentación histórica.
-Se integran elementos electrónicos al campanario, por la imposibilidad de recuperar las campanas. Las campanas originales son parte de la propuesta de paisajismo en el patio del convento, quedando como documentos de los antiguos componentes del campanario.
– El reloj será integrado con un elemento electrónico, las cédulas de la fachada serán retroiluminada, recreando la situación original del faro de la iglesia y la bahía de Valparaíso.
– Este contraste de la simpleza de la reconstrucción propuesta por contradicción pondrá en valor y resaltará el detalle de el Torreón de ladrillo y su intrincado detalle en la mampostería.
– Se integran elementos de acero en elementos decorativos a fin de evidenciar de manera sutil la reconstrucción (Púlpito, capiteles y molduras de la nave central)
Luego de establecer el Diagnóstico del Estado de conservación, se considera, que es imposible recuperar el trabajo de detalle y la calidad de los materiales originarios que se perdieron tras los sucesivos incendios que ha sufrido la iglesia de San Francisco Barón, ya que no se cuenta con los antecedentes técnicos necesarios. La recuperación de estos elementos sin un consistente registro gráfico, técnico e histórico sería una intervención con muchas lagunas de información que podría llevar a hacer un falso histórico.
Por esta razón proponemos hacer una reconstrucción basada en una contraposición contemporánea entre la histórica y valiosa fachada de ladrillos original, que se conserva, con su trabajo de mampostería, ritmo y detalle, contrastando con una reconstrucción interior minimalista. No se propone esconder o disimular su carácter contemporáneo, el proyecto quiere reflejar las distintas etapas de intervención del inmueble.
Se propone que la reconstrucción interior, base el diseño en la geometría originaria pura de la Iglesia, con su bóveda central y el ritmo de las arcadas longitudinales de la iglesia, la que contiene y conserva la especialidad interior de la iglesia propuesta por el arquitecto Eduardo Provasoli.

Esta espacialidad, el cañón corrido central, los dos cielos planos de las naves laterales, el ritmo de los pilares y sus arcos, tanto los de los muros de adobe como los de las columnatas longitudinales, presentan un gran valor geométrico arquitectónico que entregan una atmósfera solemne. La que se propone destacar, poner en valor, acompañado y acentuado por lucarnas y entradas de luz que bañan los muros del altar y el bautisterio iluminando el interior naturalmente, y en conjunto con la iluminación artificial apoyan la atmósfera propuesta.

El cuidado por la atmósfera, el ambiente, es un tema importante en la propuesta, toda la materialidad de la nueva estructura portante del techo y los revestimientos de esta es en pino radiata finger, con el fin de no ocupar árboles o maderas nobles y escasas. Las ventajas del pino es que es de fácil acceso, es una madera industrializada y al ser clara permite aplicarles barnices con tintes que, dejando ver su veta natural y su calidez, a través de colores claros contribuirán a ambientar el espacio amplio y diáfano. También el piso se propone claro y luminoso, proyectado en baldosas de cemento hidráulico para garantizar su resistencia al tráfico, colaborará con la atmósfera natural y luminosa. Contrastado con el piso, el mobiliario propuesto, que se especificó en mañío. Madera muy parecida en su veta y claridad al pino, pero de mucho mayor resistencia mecánica, el que se propone tintado oscuro acentuando su masa y peso en la composición interior.

Se propone que todos los elementos de soporte o fijación incorporados y detalles metálicos, sigan el lenguaje formal de los refuerzos metálicos galvanizados estructurales de consolidación de fachada principal y torreón de ladrillo ejecutados. Incorporados con posterioridad al terremoto del año 2010, a los cuales este proyecto complementará las estructuraciones verticales propuestas pendientes.
De esta forma todas las intervenciones y detalles incorporados marcan un contraste material. Capiteles, basas de los pilares se plantean también metálicos galvanizados, para dar unidad y consistencia a las intervenciones. La chiflonera y mamparas se plantean en cristal con estructuraciones metálicas y fijaciones contemporáneas, justamente para resaltar por oposición y así poner en valor el edificio originario.
También se proyecta reconstruir el púlpito, por su aporte geométrico al conjunto, como un elemento escultórico metálico, una lámina que envuelve el pilar y se levanta sobre el espacio central de la iglesia.

Finalmente hemos propuesto reemplazar la cruz del torreón exterior por una nueva. La original, recuperada entre los escombros del último incendio, proponemos colocarla en el altar, bajo el arco del muro de remate de la iglesia, como un recordatorio de la historia de la iglesia, sin restaurar, doblada por la caída, con su pátina de óxido y fuego.

Del Convento
Según los nuevos requerimientos, se habilitaron los espacios y se incorporaron los nuevos servicios solicitados, así como se le dio accesibilidad universal a todo el inmueble a través de un ascensor y rampas. Dado que no sufrió, su imagen de solemnidad y claustro, grandes daños producto del penúltimo incendio, se optó por mantener y reconstruir este magnífico edificio en su situación original. Para esto al igual que en la iglesia, se optó por potenciar su rotunda imagen, su volumetría austera. Así todos los servicios se decidieron esconder sobre el cielo del segundo piso, con el fin de dejar la arquitectura original lo más desprovista de intervenciones de servicios contemporáneos que restarían a la imagen originaria y al mismo tiempo este pasillo técnico, de servicio superior, permite hacer mantenimiento e incorporar cualquier servicio adicional al proyecto con mucha facilidad, manteniendo la pureza del proyecto original.

El patio.
Recuperar el carácter del patio como un lugar de introspección y encuentro, poniendo en valor la espacialidad histórica y original.
Se propone dejar el patio central con sus grandes árboles que cobijan el lugar, haciendo una explanada, superponiendo el diseño de pavimentos encontrado en registros históricos en 45°, al existente probablemente parte del proyecto de la última reconstrucción, con la idea de ir sumando las distintas intervenciones. Este patio empedrado servirá para eventos comunitarios, congregará a la gente del Cerro Barón, convirtiéndose en un polo de desarrollo e integrador social, siguiendo la idea de desarrollo comunitario del proyecto original (Iglesia, convento y escuela.)
Para delimitar virtualmente el pasillo perimetral del primer nivel con el patio central, se propuso un perímetro arbustivo, que incorpora vegetación típica de los antiguos conventos; plantas aromáticas y medicinal que ambientar el espacio desde otros sentidos.